Lo canta Calamaro y lo dice Cristina en "Vicky Cristina Barcelona". Me lo canto y me lo digo mucho últimamente

Miércoles, 8 de Octubre de 2008.

Llegará un día en que el me quede sin lágrimas. Y ese día me entregaré totalmente a esta locura desquiciante que me desborda cuando surge un contratiempo. Disfrutaré de mi demencia sin las lágrimas empañándome estos ojos miopes que cada vez ven peor.

Esta mañana he vuelto a desquiciarme. El “no, no, no” machacándome el alma, impidiéndome pensar con claridad, volviéndome totalmente absurda e invadiéndome de pensamientos suicidas. Es un sentimiento horroroso que me deja tan agotada psíquicamente como la peor de las borracheras. Es una borrachera de negatividad; que voy tragando porque me da la gana hasta que caigo rendida. Lloro sin control y no encuentro salida. En el momento quizá me doy cuenta de lo ridículo de la situación, pero el “no” es más fuerte. El “no” me martiriza. Odio este “no” que no me deja vivir y no sé cómo deshacerme de él. No, no y no.

Llámame. Llámame y enséñame a ver el “sí”. Ayúdame. Cógeme de la mano para no caer. Déjame penetrar en ti, sentirte de nuevo, entregarme a la locura. Desquíciame. Cabréame con tus desplantes. Saca lo peor de mí, hazme vomitar todo este sentimiento, que es lo que me une a ti. Sigue siendo mi “NO”. Mis ganas de encontrar el “sí”.